El libro empieza
por presentar la situación aterrorizante en la que está Abdel después de haber
viajado a España.
Abdel está viviendo ilegalmente en España. No tiene ningún documento de
identidad. Vive escondido en un mausoleo de un cementerio en Málaga. Sólo sale
por la noche para buscar algo de comer en las basuras. Tiene mucha hambre y
mucho miedo. Lo único que lleva con él es una honda, un cuaderno y un
bolígrafo. Su padre ha sido arrestado por la policía española y está en la
cárcel.
En
ese primer capítulo, descubrimos los orígenes y la infancia de Abdel.
Abdel
viene de descendencia beréber. Su padre se llama Yasir Muhbahar y su madre
Amina Muhbahar. Vivía en una casa de adobe con sus padres en la ciudad de
Hauza. Pero la casa de Abdel fue destruída por los soldados marroquíes del rey
Hassan II que rechazaban a los Tuaregs de la ciudad. La madre de Abdel murió en
el ataque. Abdel tenía seis años.
Abdel
y su padre tuvieron que huír y fueron a vivir en el desierto en una tienda de
una caravana de Tuaregs.
En el
desierto, Abdel aprendió a manejar una honda que le dio su padre. También está
educado por un hombre sabio llamado Ben Abjalah quien le prestaba libros de su
biblioteca. A Abdel, le encantaba leer. Leía libros en español y en árabe.
Aprendió mucho sobre la historia del pueblo beréber.
Siendo perseguido por los
soldados marroquíes, el padre decidió ir a España. P14 -el padre dice: “La
democracia europea es el paraíso de la libertad. Empezaremos una nueva vida en
España.”